Friday, April 1, 2011

Kapuściński epistolar

[Desde el año pasado me he encontrado inspirado por el trabajo de Ryszard Kapuściński y me he dado a la tarea de encontrar todos sus trabajos. En esta extensa búsqueda me topé con la siguiente y exclusiva correspondencia en la que una joven lectora maldice al periodista polaco y éste le responde. Agradezco a una querida amiga historiadora por traducir del polaco al español el texto que hoy comparto con ustedes.]






Carta de una joven a Kapuściński

14 de febrero de 1980

Maldito Ryszard Kapuściński:

Estoy profundamente disgustada. La lectura me ha dejado un mal sabor en la boca. Al leer el último punto, tuve que abrir una cajetilla nueva, ya que la otra la agoté mientras navegaba con sus letras de país en país. Encendí un cigarro con enojo y llevé el humo hasta mi pecho para recoger toda mi frustración. Luego exhalé, evidentemente con furia, las densas nubes sobre su libro La guerra del fútbol.

¿Por qué sigo leyendo a un periodista que nos ignora? Sí, claro, nos ojea. Pasa la vista velozmente sobre nuestros cuerpos para luego desaparecernos en el seno de las densas selvas. Entre los jeeps maltratados o las barreras de fuego de los partidarios del UPGA nunca nos encontré. Al parecer, para usted, nuestro contorno solo contaba cuando iba acompañado por el movimiento febril de nuestras caderas o la agitada sombra de nuestros pechos. Sin embargo, sigo leyendo. Maldito sea usted y maldita sea yo.

Desde el comienzo le acompañé en cada viaje y desventura. Sudé cada tensión y desmesura. Sufrí cada arma empuñada y cada golpiza. Durante Otro día de vida cargué su cámara. En El emperador siempre me aseguré que tuviera de comer y que sus telegramas llegaran a la Agencia. A su lado nunca he dejado de estar, como tantas otras que también le acompañaron. Usted, a cambio, nos paga con desprecio y distancia. Pues bien, se acabó.

Le advierto que de ahora en adelante le abandonaré. Estoy harta de ser objeto de su silencio. De vivir como ausencia. Desde ya me dedicaré a respirar en el exilio de su mirada, en el espacio en blanco que deja su pluma.

Adiós,
Anna Schneider


Respuesta de Kapuściński

8 de marzo de 1980

Estimada Anna Schneider:

Lamento su frustración ante el silencio y la extensión a la que le he sometido por tantos años. No es la primera vez que me dicen que las ignoro o, peor aún, que les presto atención solamente cuando seducen. Es un asunto complejo. A ver cómo me explico.

Ante el sufrimiento vivido por tantas personas, ¿cómo dar una representación digna del mismo? Debo ir más allá. ¿Cómo hacer conocer el sufrimiento ajeno de un género al que no pertenezco? De haberlo intentado, ¿no se me habría acusado de similar insensibilidad? ¿O tal vez de arrogante pretensión en saber?

No hay forma de hacer entender el sufrimiento. La descripción de las lágrimas de una madre sollozando inconsolablemente la pérdida de sus hijos no haría justicia a su dolor, a la complejidad del sentimiento o la pena y la tortura del cuerpo. Confrontado con ese evento, ¿qué decir? ¿Existe término posible que pueda apuntar a una angustia insondable?

La realidad es que lo intenté. Pero la trágica y pesada ternura de la mirada me desmoronó. Solo pude llorar.

Sobre su exilio, le invito a detener el viaje. ¿Acaso olvidarnos no sería un acto de mayor violencia? Quédese aquí, como ya dijo usted, a mi lado. Si prefiere continuar el viaje, hagámoslo juntos e intercambiemos miradas mientras andamos. Que sean nuestros ojos quienes comuniquen más allá de los signos. El silencio, después de todo, no es necesariamente malo.

Me despido, no antes, sin enviarle la siguiente fotografía como muestra de que sí le he mirado. Y directamente, a los ojos. Y fue, precisamente, una mirada como esa la que me desarmó.

Espero poder volver a leer una próxima carta de su parte. Le envío un sincero saludo fraternal,

Ryszard Kapuściński






Nota: En "Sobre "Kapuściński epistolar" puede leer más sobre este intercambio epistolar y cómo nos llegó.

2 comments:

  1. Confieso que me he puesto a leer, después de meditar esta entrada.

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  2. Me parece interesante:

    http://www.elboomeran.com/minisites/kapuscinski/index.html

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